Cartes al directorNotícies

Cartas al Director: “Inocente atrapada en una operación contra el delito de explotación de menores y el ciber crimen”

“Me inculpaban de un delito de Explotación de Menores por descarga y distribución de 39 archivos de pornografía infantil, algunos calificados de extrema gravedad”. 

Debbie

¿Sabéis el peligro que comporta utilizar una conexión no segura para navegar por internet? Lloret Gaceta ha hablado con Debbie, una vecina de Lloret de Mar que ha sufrido las terribles consecuencias de haber utilizado una red compartida. Su caso es terrible, acusada de pornografía infantil siendo inocente. El caso vio la luz recientemente en el diario provincial El Punt Avui, y hoy, la afectada nos ha concedido una entrevista para ampliar la información y que compartimos en nuestro apartado: las Cartas al Director de Lloret Gaceta.

Debbie tiene 57 años, vive en Lloret desde hace 18 años y es traductora autónoma desde hace 25, básicamente trabaja desde su ordenador, utilizando constantemente internet para navegar, enviar correos, y realizar búsquedas.

Debbie es socia fundadora de una protectora de animales discapacitados desde el 2002. En 2014, a raíz de la desaparición de un vecino en Lloret, creó en Facebook la página “Desaparecido en Lloret” (para avisos de personas desaparecidas, animales perdidos y encontrados, cosas robadas, etc.) Y desde hace 4 años, colabora con un policía jubilado de su país natal, investigando para ayudar a víctimas de delitos y sus familias. Actualmente está realizando un Máster en Victimología. Debbie también colabora en nuestro medio escribiendo a menudo su columna de opinión sobre temas relacionados con la justicia.

-Debbie; ¿Qué pasó para que te acusaran y te investigaran?

A principios de junio 2023, íbamos camino a un congreso de criminología en Londres donde iba a ser ponente, y me llamó la Policía Local de Lloret pidiendo que fuera a recoger una citación para comparecer en el juzgado. El agente, muy amable, me dijo “ te citan como inculpada”. Me quede atónita. Fijamos mi comparecencia ante el juez para el 2 de agosto de este verano. No querían decirme por teléfono para que era. Al insistir me dijo: “Es que es un tema muy sensible”. 

Me acusaron de Explotación de Menores por descarga y distribución de archivos de pornografía infantil de extrema gravedad. 

Salía mi dirección IP en su rastreo, y Movistar les proporcionó mis datos. Comparecí ante la jueza el 2 de agosto, llevaba casi dos meses sin saber si acabaría en la cárcel por algo que no había hecho, y cuando empiezan a hablar de “leerte tus derechos” y fuera de los juzgados ves a Policías Nacionales armados es todo muy impactante. 

– ¿Qué tipo de conexión a internet tienes para que pudieran acceder en tu nombre o ID? 

Tenía el típico router WIFI de Movistar. Uso un antivirus de pago que pensaba que protegía mis redes (lo hace, pero solo cuando tienes el dispositivo conectado). Tenía un dispositivo del sistema Fon, que se usa entre gente que viaja. Comparte una parte de tu WIFI con otros subscriptores, es una especie de WIFI solidario. 

-¿Cuánto te ha costado probar tu inocencia?

Casi la vida. Yo creía en aquello de “inocente hasta que se demuestre lo contrario”, pero me encontré que con temas de pornografía infantil, lo llaman así, pero su nombre correcto es material de abuso sexual (MASI) nunca olvidemos que son imágenes de violaciones de menores, la gente automáticamente asume que eres culpable. Es difícil encontrar abogado cuando te acusan de “esto”.

Con la inestimable ayuda de una periodista con la que colaboro en algunos casos de personas desaparecidas, Tura Soler (El Punt Avui), pude contratar a unos abogados de Girona, Benet Salellas y Mónica Tarradellas, que me trataron como víctima, aunque secundaria, de una red de criminales, y un perito judicial informático forense, Bruno Pérez Juncà, que vino a casa e hizo un informe para el juzgado. 

Constaba que se hicieron una serie de conexiones supuestamente desde mi IP durante 2 semanas entre el 25 de septiembre y el 10 de octubre del 2022. Yo ese día volvía de Inglaterra tras un mes allí para una boda y otro congreso de criminología y con tickets de compras lo podía demostrar, pero la policía nunca llegó a examinarlos, me inculparon simplemente porque salía mi IP. A nivel monetario, me ha costado unos cuantos miles de euros demostrar mi inocencia. Pero el monetario no ha sido el coste más grande.

– ¿Cuál ha sido tu afectación moral y a nivel psicológico?

No me he suicidado porque la gente habría pensado que era culpable. Solo por eso, y no lo digo a la ligera. Llevaba dos años recuperándome de la muerte de mis padres en un espacio de 3 meses en el 2021. Igual que para mis hermanos, ese duelo ha sido una lucha monumental. Luego llegan unas acusaciones tan surrealistas y te hunde. 

No aguantaba pensar que alguien me pudiera mirar y pensar que nunca haría daño a un niño, ni a nadie, cuando llevo toda una vida intentando ayudar a los más vulnerables. La policía me estaba investigando desde enero, sin yo saberlo: habían solicitado mi certificado de penales, me iban a rastrear todos los dispositivos (tampoco habrían encontrado nada, ahora lo sé, pero en ese momento no sabía si podía haber dado en un enlace trampa). Aunque no tengas nada que esconder, te sientes que van a violar tu intimidad 

Me daba miedo sonreír a los niños por la calle o en un restaurante por si alguien pensara mal, y todavía me cuesta. Ahora parece exagerado, pero se te pasa de todo por la cabeza. Estoy saliendo adelante gracias, aparte de las personas ya mencionadas y la jueza (que lo vio claro y lo razonó en su decisión), a mi círculo más íntimo y a mi psicóloga, pero me ha causado una especie de estrés postraumático. 

Nunca he visto las imágenes que se suponía que había distribuido (ni tengo los programas que dicen que utilicé) pero los papeles de los juzgados incluían algunas como muestra, en blanco y negro, muy borrosas. Las miré para asegurar que no reconocía a ningún vecino de Lloret. No sé si nunca podré quitar esas ideas de imágenes de mi cabeza. 

– ¿Sospechas de alguien? 

No sospecho de ninguno de mis vecinos. Seguramente fue alguien que estuvo justo esas dos semanas de vacaciones en la urbanización de Lloret donde vivo, posiblemente personas de otro país. 

– ¿Qué mensaje quieres hacer llegar a los ciudadanos?

La pornografía infantil es una lacra. Hay que parar a estos. NUNCA hacer la vista gorda si descubres que alguien la está visualizando, SIEMPRE hay que denunciar. Si tú, por error, visualizas o descargas una imagen denuncia directamente a la policía. Te pueden detener incluso por verlo por error.

Las redes WIFI se pueden hackear muy fácilmente. Me he enterado de que los pedófilos se las saben todas. Hackean, craquean, usan amplificadores de WIFI, o falsean una dirección IP de otro país. Por favor, asegurad vuestras redes WIFI y dispositivos, cuidad de vuestras familias y hablad con vuestros hijos, y vecinos, pienso que hemos de fortalecer nuestras comunidades, solo así vamos a ponérselo cada vez más difícil a los criminales.

He de añadir que esta vivencia me ha hecho reflexionar mucho sobre el tema de la inocencia. Siempre que veía suicidios de personas esperando juicio, supuse que era porque “algo tenía que esconder”. Pero al haber estado en esta situación, entiendo que a veces esa lucha se te hace demasiado grande. 

¿Por qué decidiste hablar de tu experiencia en público?

Pienso que los criminales demasiadas veces cuentan con el silencio de sus víctimas, por eso, contando mi historia, y advirtiendo a los lectores, quiero ayudar a ponérselo más difícil a estos Y agradezco el apoyo, la preocupación, y la fe inquebrantable en mí que ha mostrado la gente de mi círculo más cercano.

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *

Articles relacionats

Back to top button