La asociación Lerbycop de Lloret de Mar, que abarca cuatro urbanizaciones del municipio y algunos negocios, ha presentado un recurso contencioso-administrativo contra el ayuntamiento. Lo ha hecho después de que las facturas de agua del tercer trimestre del pasado año contabilizaran trece días más de la cuenta.
Un retraso en la lectura que la entidad calcula que ha incrementado el importe en más de 30 euros por vivienda, afectando en total a unos 20.000 hogares (casi un total de 600.000€). El presidente de la asociación, Miguel Moreno, denuncia el “silencio administrativo” del consistorio, que disponía de un plazo de seis meses para dar respuesta a la demanda de los vecinos. Vencía en agosto pero el ayuntamiento aún no se ha pronunciado.
La asociación alerta de que el retraso en la lectura de contadores supuso “grandes aumentos” en el coste de la factura. Y es que, en la zona, cuando se superan los 55 metros cúbicos consumidos, el canon que fija la Agencia Catalana del Agua (ACA) asciende a casi cinco euros por metro cúbico. Un coste extra que 1.871 abonados al servicio pidieron ya que se les devuelva con una reclamación conjunta y que aún esperan respuesta.
En otoño del año pasado, cuando se produjo la incidencia y se notificaron las primeras quejas, el teniente de alcalde de Territorio del Ayuntamiento de Lloret, Albert Robert, restó importancia al asunto admitiendo los retrasos en la lectura del agua y atribuyéndolos a bajas de trabajadores de la compañía concesionaria que gestiona el servicio, Aqualia, por covid.
