Lloret del Pasado: “Les cases de l’Àngel” como nunca antes las habías visto
¡Muy buenas! ¡Ya estoy aquí de nuevo! ¿Qué tal estáis? Una vez más tengo que daros las gracias por seguir mis columnas en el diario Lloret Gaceta, si todavía no me sigues…¡Bienvenido/a! Soy David Moreno, un apasionado de los lugares abandonados, de las reliquias, de lo antiguo, de lo antaño, vamos, que en resumidas cuentas soy un enamorado del pasado, en este caso de Lloret del Pasado, y en esta ocasión me complace presentaros un nuevo lugar explorado que estoy seguro que os gustará. ¿Me acompañáis?
David Moreno
¿Qué vecin@ de Lloret de Mar no se ha escapado alguna vez por los parajes del monasterio de Sant Pere del Bosc? Ya sea para caminar, correr, ir en bici, ir a comer, o simplemente para ver los monumentos al aire libre que hay de camino al santuario. La historia como monasterio de Sant Pere del Bosc data del siglo XVII cuando este perteneció a unos benedictinos de Blanes (aunque algunos datan su origen desde mucho antes como una pequeña ermita existente desde el año 1079).
El aspecto actual que conocemos hoy día se debe a las reformas que realizó Nicolau Font cuando compró y restauró el monasterio que estaba en ruinas a finales del siglo XIX , Nicolau Font influenciado por la arquitectura modernista erigió varios monumentos a lo largo del camino hacia su propiedad (que era el antiguo monasterio), uno de los monumentos mas notorios es quizás el monumento al Ángel, que está situado encima de una colina llamada “Turó de ses pedres Lluidores” a medio camino entre Lloret de Mar y del monasterio de Sant Pere del Bosc.
Erigir un monumento tan grande en un lugar tan apartado era aquel entonces una tarea dificultosa, así que para solventar esos problemas se construyeron un par de casas a medio camino a las que llamaron como: “Las casas del Ángel”, estas fueron construidas simultáneamente en el año 1901 como refugios y almacenes para las obras del monumento.
La casa que está a la derecha del camino dirección Sant Pere del Bosc (la que tiene forma de capilla) sirvió como resguardo para los arquitectos y escultores del monumento al Ángel y para el señor Nicolau Font y familia cuando tenían que supervisar las obras o refugiarse en caso de mal tiempo. En cambio los trabajadores tenían la casita de la izquierda, que es del mismo tamaño que la casa de la derecha, pero con menos ornamentos modernistas, a pesar de esto, no es la casa menos importante, ya que en la zona de abajo exterior tenían el lavadero, el pequeño almacén y bebedero para los animales, en el primer piso tenían la cocina, el aseo, un pequeño comedor y dos habitaciones, y en la en la zona de la buhardilla hay espacio para dos camas más; vamos que las dos casas eran igual de útiles.
El monumento al Ángel se terminó en el año 1904, pero las casas todavía eran de mucha utilidad, la del propietario servía como refugio para el y su familia, y la casa de los trabajadores, (que es la del reportaje que adjunto a continuación) como refugio para peregrinos así como la casa de los guardeses que vigilaban los campos y bosques de los alrededores. Comparto las imágenes que pudimos realizar:
Sin embargo, a finales de la década de 1970 estas casitas (incluido el monumento al Ángel) entraron en una grave decadencia; y los dueños y herederos de Nicolau Font, ya sea por falta de tiempo o motivos varios, es de observar la falta de mantenimiento en estos últimos años. Así que lo más factible fue tapiar la casa y refugio de Nicolau. Sin embargo, la casa de este reportaje, al no haber ni peregrinos ni guardeses, pues la utilizaron como trastero hasta 1994, a partir de entonces ya quedó abandonada y sin utilidad alguna.
Y bueno, estamos ya en el año 2023, según el Ayuntamiento de Lloret con un convenio firmado con la actual familia, propietaria de todo este espectáculo arquitectónico, quieren restaurar y adecentar estas casas así como los monumentos, pero mientras esperamos a que llegue ese momento, ya que del dicho al hecho hay un buen trecho, dejo aquí inmortalizado mi reportaje del interior y exterior de una de esas casas construidas en el año 1901, para mis seguidores, para el pueblo de Lloret y para Lloret Gaceta.
Y si me preguntáis como entré… no hay más misterios que por la puerta de entrada (y luego hablan de proteger el patrimonio).
En fin. ¡Espero que os haya gustado este bonito y pequeño lugar que ya forma una parte de la historia de Lloret! ¡Nos vemos en el siguiente reportaje! ¡Hasta la próxima amics i amigues! ¡Chau Riau!