Este pasado domingo 16 de junio, los alumnos y alumnas de la danza aérea de Lloret cerraron un año más de éxito con un espectáculo de fin de curso único y que tuvo lugar en el centro donde entrenan: Budha Jump de Lloret de Mar. Este evento marca el tercer año consecutivo desde la inauguración de la escuela, la cual sigue creciendo bajo la dirección de Abel Brazo Gadella, el artífice de este novedoso deporte.
Contacto de la escuela de acrobacia aérea en Lloret de Mar: 698 78 19 15.
Resumen del espectáculo de fin de curso 2024
Abel Brazo Gadella, de 42 años, es el profesor que imparte las clases en el Budha Jump Lloret. Abel, residente en Lloret desde hace años, ha recorrido el mundo con su arte de bailaor flamenco, pero decidió dejar de viajar para dedicarse a un nuevo terreno profesional y atender a sus padres. Empezó a dar clases de acrobacia aérea con solo diez alumnos en el primer curso, pero el éxito fue en aumento y ahora cuenta con 50 personas que asisten regularmente a sus clases.
“Tengo niños desde los 5 años y personas de todas las edades. Es increíble que en Lloret tenga 50 alumnos de este deporte elitista. Ni en las escuelas de Barcelona alcanzan este volumen de alumnos”, comenta Abel, quien también destaca que sus colegas de la escuela de circo Rogelio Rivel de Barcelona consideran esta situación excepcional.
Abel, que lleva el flamenco en la sangre gracias a su padre cantaor, empezó su carrera artística a los 15 años en Ecuador y luego en las Islas Baleares y Canarias. Se instaló en Lloret para cuidar a su padre enfermo y trabajó en el Gran Casino, el castillo de Tordera, y La Siesta con José León. Además, impartió clases de flamenco en la Escola de dansa Daina de Blanes y actualmente en la escuela de danza de Sara Díaz en Lloret.
Formado en “El centro de las artes del circo” en Barcelona, Abel obtuvo cualificaciones profesionales que le permiten enseñar acrobacia aérea y danza en el aire utilizando trapecio fijo, telas, cuerda y aro. Este deporte no solo es físico, sino un auténtico reto psíquico que ayuda a superar miedos, mejorar la coordinación, agilidad, y expresión corporal, fortaleciendo la confianza y la autoestima de sus practicantes.
Los espectáculos de fin de curso de la escuela de Abel arrasan en asistencia de público. El año pasado, más de 250 personas acudieron al evento, lo que obligó a dividir las actuaciones debido a la capacidad limitada del Budha Jump. Para el próximo año, se espera celebrar el espectáculo en el Teatro de Lloret para acomodar a un mayor número de espectadores.
