Cada verano, la bulliciosa vida nocturna de Lloret de Mar se llena de jóvenes que buscan diversión y aventura, hasta aquí, todo normal. Durante años, un punto de encuentro para miles de personas que desean disfrutar de sus vacaciones, sin embargo, en medio de las luces de neón y la música estridente, un grupo de misioneros ha encontrado un propósito diferente en estas mismas calles: llevar el mensaje del evangelio a aquellos que, en medio del bullicio, buscan algo más profundo.
Beach Mission, una organización misionera interconfesional, ha hecho de Lloret de Mar uno de sus principales puntos de acción en Europa. Simon Klein, de 29 años, es uno de los líderes de esta misión. Durante su adolescencia, Klein frecuentaba las mismas calles, discotecas y bares de Lloret que hoy recorre con una misión completamente diferente. “Solía venir aquí de fiesta, ahora lo hago para compartir mi fe y la transformación que Jesús ha hecho en mi vida”, comenta Klein.
El enfoque de Beach Mission es simple pero poderoso: conectarse con los jóvenes que disfrutan de la vida nocturna, ofreciéndoles ayuda, oración y un oído atento. “Muchos jóvenes vienen aquí buscando diversión, pero pronto se dan cuenta de que la fiesta no llena el vacío que sienten”, dice Klein. “Nosotros estamos aquí para escuchar, para hablar con ellos sobre nuestras propias experiencias y para compartir el amor de Dios de una manera genuina y accesible”.
Este verano, 2024, la organización ha tenido un impacto notable en Lloret de Mar. Una de las noches más significativas para Klein y su equipo ocurrió alrededor de las tres de la madrugada, cuando una fila de jóvenes esperaban para hablar con ellos, algunos pidiendo oración, otros simplemente buscando una conversación profunda en medio del caos nocturno. “La mayoría de ellos estaban sorprendidos de encontrar a personas dispuestas a escucharlos y hablarles sobre Dios en un entorno tan inesperado”, recuerda Klein.
La labor de Beach Mission no se limita a las palabras. También organizan actividades como barbacoas cercanas a la famosa y concurrida avenida de clubes y bares de Lloret, donde invitan a los jóvenes a unirse en un ambiente más relajado. Estos eventos proporcionan una oportunidad única para entablar conversaciones significativas fuera del ruido y las distracciones de la vida nocturna.
La visión de Beach Mission es clara: conectar a los jóvenes con Jesucristo y transformar su vida mediante un encuentro genuino con la fe. Además, buscan causar un impacto positivo en la cultura de la vida nocturna, promoviendo un ambiente de seguridad, confianza y conexión, tanto con Dios como con los demás.
“No se trata solo de predicar, sino de estar ahí para ellos, demostrarles que hay algo más que la fiesta, algo más que puede traer verdadera paz y alegría”.
Klein
Beach Mission ha logrado captar la atención de muchos a través de su presencia en redes sociales, donde uno de sus videos alcanzó más de un millón de visualizaciones. En el video, se muestra a los voluntarios de la misión, fácilmente identificables por sus polos amarillos, interactuando con los jóvenes en las calles de Lloret. “Es increíble ver cómo algo tan simple como una conversación puede tener un impacto tan profundo en la vida de una persona”, añade Klein.
En Lloret de Mar, Beach Mission no solo está intentando cambiar vidas, sino que también está redefiniendo lo que significa disfrutar de la vida nocturna. Con su enfoque en la compasión, la sinceridad y la fe, están logrando llevar un mensaje de esperanza a un lugar donde muchos jóvenes, incluso en medio de la fiesta, se preguntan si eso es todo lo que la vida tiene para ofrecer.
Protestantes holandeses!!! luteranos, calvinistas y anglicanos … todos del mismo saco. Los que persiguieron catolicos por toda europa y los mataron a miles.
La historia cambia de tantas veces.