¡Hola, hola! Me he hecho de rogar un poquito esta vez pero aquí estamos otra vez para hablar sobre dolor durante el sexo. Escogisteis vosotros el tema de este mes y quisisteis que hablase sobre sexualidad. Vamos allá.
El dolor durante el sexo no es normal, aunque es tan común y lo padecen tantas mujeres que lo hemos normalizado. Y hablo de mujeres porque es mucho más común que en hombres, pero esto mismo puede pasar en cualquier cuerpo. El dolor es una señal de alerta del cuerpo para que sepamos que algo no está funcionando correctamente, ningún dolor es en vano ni se tiene que pasar por alto.
Los dolores propios de las mujeres se han silenciado durante siglos, se han tachado de histeria, se han disfrazado de trastornos mentales. Incluso hoy, en muchas consultas de ginecología (en demasiadas para mi gusto) se sigue oyendo que el dolor menstrual es normal y lo tapan con anticonceptivos, se les sigue diciendo a las pacientes que es normal que duela la penetración, o que si no se relajan no van a poder poner el especulo dentro de la vagina cuando no es una cuestión de relajarse o no, sino de que hay una hipertonía muscular del suelo pélvico que impide la entrada de lo que sea en la vagina. Si tienes dolor es real, es porque algo no está bien y hay que tratarlo, y que no te digan que es normal ni que te relajes.
Dicho todo esto os quiero explicar la importancia de la fisioterapia en la sexualidad. Como ya he comentado es muy común el dolor durante el sexo, puede aparecer en diferentes momentos (durante la excitación, durante la penetración más o menos profunda, durante el orgasmo, después del orgasmo), en diferentes zonas (en la entrada de la vagina, en un punto concreto o en una zona más amplia, en un lado de la vulva o en otro, en la parte profunda de la vagina) y de diferentes formas (como si te clavasen una uña, como si te diera una rampa, como si te escociera, como una punzada o como si tuvieras dolor de ovarios).
El dolor en la zona genital se siente de muchas formas diferentes y a veces cuesta definir donde se localiza porque no se suele conocer bien la zona y por tanto es complicado definirlo.
Siempre que exista dolor en la zona genital se debería pasar una revisión con un/a fisioterapeuta especializado/a en suelo pélvico y fisiosexología. En la primera revisión podremos definir donde se origina el dolor, que tipo de dolor es, cuando ocurre y poder marcar unos objetivos de tratamiento. Y tratarlo, porque seguro podremos tratarlo.
Tu dolor si es real, que a nadie se le ocurra decir que no.
¡Mereces disfrutar del sexo, no sufrirlo!
Sarah Marin Torres
675955624
