Lloret frena la puesta en marcha de la desalinizadora móvil

Tal y como adelanta el diario ARA, Lloret de Mar ha frenado la puesta en marcha de la desalinizadora móvil que había adquirido el gremio de los hoteleros tras la relajación de las restricciones por sequía. La decisión se produce después de las lluvias de primavera que han aliviado la situación hídrica del municipio. Aunque inicialmente se había previsto su instalación en junio, la ubicación definitiva aún no está determinada.

El gremio de hoteleros de Lloret de Mar había decidido adquirir esta desalinizadora móvil para garantizar el suministro de agua para llenar las piscinas durante toda la temporada turística y también poder vender el sobrante. Esta medida se consideró necesaria debido a las restricciones de agua que afectaron a la zona. Sin embargo, con la mejora de la situación hídrica, han decidido dejar toda la instalación preparada en una nueva ubicación aún por determinar, para poder conectarla si fuera necesario durante la temporada turística.

La ubicación inicial seleccionada fue la explanada de la Roca d’en Maig, en el extremo sur del paseo marítimo del municipio. Esta elección se hizo de manera urgente, con la intención de tenerla operativa a principios de junio. Sin embargo, el Ayuntamiento todavía estaba pendiente de obtener los permisos necesarios para dicha instalación. Con el fin de las restricciones más severas, tanto el Ayuntamiento como el gremio han considerado más prudente gestionar los permisos para una ubicación más adecuada.

Las máquinas, que valen 1 millón y medio de euros cada una, se están ultimando en Valencia, hasta donde ha viajado un equipo de TV3 para hacer un reportaje que se ha emitido en el “Telenotícies vespre” de ayer. Para ver el reportaje accede mediante este enlace. El encargo es de dos desalinizadoras móviles que monta una empresa especializada en equipos para tratamiento de agua. Funcionan a partir de dos contenedores de 12 metros de largo donde pueden desalinizarse hasta 50.000 litros por hora.

Cuando llegue a Lloret, a finales de junio o principios de julio, la máquina quedará a la espera por si la sequía se endurece.

Controversia

Los primeros comentarios de los vecinos de Lloret de Mar al pie de esta publicación del diario ARA tras conocer esta decisión no se han hecho esperar. Algunos residentes han asegurado que la falta de permisos y el impacto visual y sonoro de la desalinizadora fueron factores determinantes en la decisión. “En resumen: no tenían los permisos; no desalinizarían agua de mar, sino de pozos; y generarían un gran impacto visual y sonoro”, comentó un vecino.

Otros vecinos expresaron su escepticismo sobre las razones detrás de la decisión. “De verdad que lo detienen. ¿Es por qué no habían hecho las cosas bien (permisos de obras, estudios correctos para hacerlas, etc.) o es porque piensan que como ha llovido ya saldrán del paso este verano? Uffff”, expresó otro residente, cuestionando si la decisión estaba bien fundamentada.

Además, algunos consideran que es un error retrasar la instalación, ya que no hay garantías de que las lluvias se mantengan. “Pues es un error, ya que no hay ninguna seguridad de que vuelva a llover en poco tiempo”, advirtió un vecino preocupado por la incertidumbre climática.

La situación sigue en desarrollo, y el Ayuntamiento de Lloret de Mar deberá decidir la ubicación definitiva para la posible instalación de la desalinizadora móvil, asegurándose de tener todos los permisos y estudios necesarios para garantizar su funcionamiento sin problemas en caso de que vuelva a ser necesaria.