La mediación policial y la presión vecinal frustran un caso de okupación en Lloret de Mar

El mundo de la okupación és sin duda un tema candente entre la sociedad, y rechazado por la gran mayoría. Hoy aclaramos algunas dudas ante este movimiento e informamos de este sonado caso entre la vecindad del barrio de El Rieral (Lloret de Mar) vivido este pasado fin de semana. 

Eran las 17:24h del sábado 10 de septiembre, cuando la Policía Local recibe la llamada de un vecino alertando de una reciente okupación en un inmueble situado en la primera planta de un bloque de la calle Masia del Roser. “Una persona de mediana edad entró en la mencionada vivienda con la intención clara de ocuparla”, declaró el denunciante. El piso: una de las incontables propiedades que los bancos poseen, en este caso, un inmueble deshabitado desde hacía más de 10 años.

A los pocos minutos, al llegar al lugar, los primeros agentes se encuentran una situación un tanto incómoda, al observar al ocupante en una ventana con una clara declaración de intenciones “Esta noche o duermo bajo un techo, o en comisaría o en un ataúd” gritó en varias ocasiones junto con otras amenazas por tirarse. Fue entonces cuando la Policía Local activó el protocolo de suicidios, ante la amenaza y empezaron los mismos con la mediación. La alerta la efectuaron a las 18:02h y se presentaron a la zona: 3 dotaciones de bomberos, 2 dotaciones del SEM, 2 patrullas de Mossos d’Esquadra y 3 dotaciones de refuerzo de la policía local de Lloret de Mar. 

Fue entonces, con la llegada de los numerosos servicios de emergencias, cuando empezó una mezcla de preocupación y enfado entre los vecinos de la zona, creando un gran revuelo. Casi dos horas de mediación policial, donde intervinieron también los servicios de emergencias y bomberos para intentar que el okupa abandonara la vivienda evitando cualquier daño personal. Cuando el superior que estaba al mando del suceso, decidió dar por finalizado el caso sin éxito pero dejando perplejo y dudoso al ocupante ante todo el caos que había ocasionado, cuando empezaron a abandonar la zona todas las patrullas que hasta allí habían llegado hacía más de dos horas.

Pero tal como adelantábamos en el enunciado de esta noticia, la presión vecinal, tenía preparada una sorpresa, ya que aparte de intentar mediar también con el ocupante en alguna ocasión durante las dos horas, manifestarse en contra de esa okupación a base de cánticos y frases animando a que marchara de la vivienda okupada y que no era bienvenido, fueron dos vecinos, quien tras una emotiva conversación con el “invasor” y una dura situación, consiguieron convencerlo para que abandonara la zona. 

Con esto concluimos que la mediación policial y la presión vecinal fueron el sábado dos aliadas clave para evitar una nueva okupación en Lloret de Mar. Esta persona queda investigada por la okupación de una vivienda y por desobediencia a la autoridad.

_______________________CONOCE MÁS SOBRE LA OKUPACIÓN…

Para poner en situación al lector con el tema de las okupaciones, hay que puntuar que no todas las okupaciones son iguales tal y como está la ley hoy en día. No es lo mismo legalmente que una persona entre en un domicilio en el que habiten habitualmente una persona o una familia a que en entren en una casa o finca de tu propiedad que no utilices o una vivienda con esta misma característica propiedad de un banco. El primer caso se conoce como allanamiento de morada, que conlleva la pena de entre seis meses a dos años de cárcel, y está recogida en el artículo 202 del Código Penal. Pero cuando la okupación se produce en un inmueble que no se usa, hablamos de un delito de usurpación de viviendas, tipificado en el artículo 245 del Código Penal español.

Sin embargo, la Policía ha explicado que “si bien no existe este plazo en la legislación, está establecido por jurisprudencia que hay un plazo de 48 horas en el que la okupación se considera un delito flagrante de allanamiento de morada”. Hemos preguntado si esto se aplicaría también a segundas viviendas o a viviendas vacías, y nos han asegurado que este límite “se aplica a todas las viviendas, independientemente de si es la primera, la segunda, la tercera o la cuarta”.

¿Y qué significa esto de delito flagrante? Según el artículo 795.1 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal es aquél que se está cometiendo o que se acaba de cometer. A quien comete uno la ley le conoce como “delincuente in fraganti”, y el artículo 492 de la misma ley dice que los policías tienen la obligación de detenerle.