Exploramos los biotopos submarinos de Lloret: una joya oculta bajo el mar
Esta semana nos hemos sumergido con el equipo de Océanos Diving Center, situado en Cala Canyelles de Lloret de Mar, para descubrir uno de los secretos mejor guardados del litoral: los biotopos artificiales que el Ayuntamiento instaló en 1994 a más de 20 metros de profundidad.
Una inmersión única con historia y propósito
Guiados por Roger, uno de los instructores de la empresa de buceo, nos adentramos a varios metros de la costa para visitar estas estructuras submarinas que, casi 30 años después, siguen cumpliendo su función: proteger la biodiversidad marina y frenar la pesca de arrastre.
Más de 70 bloques submarinos que salvan vidas marinas
Estas estructuras de 5 metros actúan como un hogar para langostas, almejas, nudibranquios y muchas otras especies. También son clave para preservar los prados de posidonia, auténticos pulmones del Mediterráneo. “La pesca de arrastre causa mucho daño, y estos bloques actúan como barrera natural”, nos explica Roger mientras bucea entre ellos.
Una nueva propuesta para seguir protegiendo el ecosistema
Desde Océanos Diving Center también han impulsado un nuevo proyecto, presentado recientemente al Ayuntamiento, para crear más zonas marinas dedicadas al crecimiento de algas, fundamentales para la producción de oxígeno y el equilibrio del ecosistema marino.
¿Qué son los biotopos y por qué son tan importantes?
Los biotopos marinos son zonas donde las condiciones del entorno —como la salinidad, la luz o la temperatura— permiten la vida de especies específicas. La palabra viene del griego: “bios” (vida) y “topos” (lugar). En el Mediterráneo son clave para conservar la biodiversidad y garantizar el equilibrio ecológico del fondo marino.
Esta visita ha sido una muestra de que, bajo el azul del mar de Lloret, hay mucho más de lo que se ve a simple vista. Y que cuidar de estos espacios es tarea de todos.