Cartas al Director | “Siento que el abandono nos está robando la vida en el casco antiguo”

Lloret de Mar, y en especial su casco antiguo, es un lugar con encanto y mucha historia. Sin embargo, en los últimos años esta zona emblemática ha visto cómo su situación se ha deteriorado, afectando la calidad de vida de quienes la habitan. La siguiente carta es un testimonio personal y sincero de Adriana Núñez Cal, vecina de la zona desde hace más de veinte años, que quiere compartir con todos su experiencia y preocupación por el presente y futuro del barrio. Adriana Núñez Cal lleva dos décadas residiendo en Lloret de Mar y desde hace diez años vive en el corazón del casco antiguo. Para ella, este lugar es mucho más que un barrio: es su elección de vida, un sitio donde quiere seguir disfrutando y que reclama atención urgente para que no se siga degradando.

Buenas tardes…

Me llamo Adriana Núñez Cal, resido actualmente en el casco antiguo, donde vivo desde hace diez años. Es una zona encantadora, llena de historia, con la comodidad de tener la zona comercial cerca y la playa a pocos metros. Me gusta vivir aquí, no estoy por casualidad, sino porque he elegido este lugar.

Sin embargo, en esta última década, el casco antiguo ha sufrido una degradación progresiva hasta alcanzar niveles que ya resultan insostenibles. A pesar del enorme esfuerzo de la organización de vecinos del barrio, que hace lo posible por mantener el entorno, considero que no es suficiente.

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La presencia de pisos ocupados —algunos con familias, otros con organizaciones de dudosa legalidad— ha convertido nuestras calles en puntos habituales de consumo de drogas y escenas de violencia nocturna. Durante el día, la situación no mejora: la acumulación de basura en las aceras es constante. Los vecinos depositamos nuestros residuos donde corresponde, pero, debido a la situación económica, política y social actual, muchas personas rebuscan entre ellos para sobrevivir. Quiero pensar que su actitud es inconsciente, pero el resultado es el mismo: nuestras calles quedan sucias, insalubres y descuidadas durante todo el día.

La recomendación de las autoridades: mudarse

El Ayuntamiento debería tomar medidas urgentes para evitarlo. Esta situación no solo afecta la imagen del barrio, sino que pone en riesgo la salud de todos, incluidas las personas que revuelven esos residuos, especialmente con las altas temperaturas de estos días.

En más de una ocasión, ante situaciones indeseadas, he tenido que llamar a la policía, y aunque han actuado con profesionalidad, me he encontrado con recomendaciones —seguramente bien intencionadas— de que tal vez lo mejor sería mudarme. Lo digo con el mayor respeto, pero creo que no deberíamos resignarnos a abandonar nuestros barrios por falta de soluciones efectivas. Los vecinos queremos vivir en paz donde elegimos estar.

Una llamada a la implicación ciudadana

Con esta carta me desahogo. No entiendo cómo se toman decisiones tan desastrosas en algunos aspectos y, en cambio, cuando de verdad deberían tomarse medidas —como en el caso del abandono del casco antiguo—, el Ayuntamiento brilla por su ausencia. Eso sí: los impuestos se cobran puntualmente, aunque la eficiencia en los servicios que recibimos deja mucho que desear.

Creo que los ciudadanos deberíamos implicarnos más. Porque si no lo hacemos, el sistema seguirá dándonos la espalda y tratándonos con indiferencia.

Atentamente,
Adriana Núñez Cal
Vecina del casco antiguo de Lloret de Mar