Columna de Opinión | Monólogo de Navidad: No bastan tan solo las buenas intenciones


El nacimiento es la única ocasión de la que tenemos una garantía absoluta de que, por un instante, el ser humano ha sido un verdadero milagro.
Simone Weil
Queridos lectores:
Esta es la presentación de La Columna de Vickie en Lloret Gaceta. La creación de esta columna comenzó a raíz de una idea que tuve viendo una serie con mi hija. Me inspiró uno de los personajes que escribía sobre los chismes de la sociedad. Esta columna irá en paralelo con mi blog, El Rincón de Victoria, y también podréis disfrutar de su lectura en Arte&Más, una revista cultural en la que encontraréis un amplio y rico contenido literario que abarca todas las expresiones artísticas. El contenido de esta Columna será variado: contaré vivencias propias y ajenas, también hablaré de los problemas sociales que nos atañen a todos. Por otro lado, estaré encantada de escribir sobre cualquier tema que se me pida.
A mí, la Navidad me encanta, me ilusiona y me alegra el alma, y no solo porque se celebra el nacimiento de Jesucristo, una figura religiosa e histórica, que representa la encarnación de Dios en la tierra para así poder estar cerca de la humanidad, y al que por cierto mataron por decir verdades incomodas. También simboliza este nacimiento el resurgir del hombre nuevo y la llegada de la luz divina a un mundo necesitado de esperanza; ofreciendo un nuevo comienzo a la humanidad y perdonando todos sus errores del pasado.
Y en un sentido más profundo, más allá de su interpretación religiosa y festiva, representa el poder de renacer y renovarse que tiene el ser humano.
Luego llega Nochevieja, ahí es cuando celebramos el cierre de un ciclo y se da la bienvenida al nuevo año. Es una excelente ocasión para reflexionar sobre lo vivido; para dejar atrás lo negativo, lo que no deseamos, y para proponernos nuevos comienzos y retos a cumplir en el año que está cerca de comenzar. Se trata de un momento cargado de simbolismo, en el que nos planteamos, con esperanza e ilusión, si estamos dispuestos a esa renovación.
En caliente solemos ponernos el colofón muy alto, y el espíritu navideño nos encandila alentándonos a entrar en el nuevo año repletos de buenas intenciones, de las cuales, la mayoría no ven ni siquiera la luz. Y pasado un tiempo, se encuentra uno con la maleta que llevaba el año anterior, cargada de sueños por cumplir, ausencias que duelen, guerras y hambre por todo el mundo, un planeta amenazado por nosotros mismos, desigualdades e injusticias que claman al cielo… En definitiva, ¡una verdadera calamidad!
En nuestra mano está el no abrir la susodicha maleta y dejarla cerrada eternamente. Recordando que todos tenemos una labor que hacer aquí, porque nuestro nacimiento o resurgir, es un verdadero milagro de vida que trae consigo un sinfín de nuevas posibilidades, por lo que debemos ser agradecidos, aprovechándolo y valorándolo.
Cuando llegamos a este hermoso lugar, lo hacemos con una estrella repleta de amor, paz y bondad; su luz alumbra nuestro camino, uniéndonos con respeto y apego a nuestra madre tierra; dándonos capacidad para superar y recordar con cariño a quienes marcharon; abriéndonos las puertas que pedimos y deseamos para forjar nuestro destino, otra cosa es que no nos decidamos a cruzarlas… Por lo tanto, es nuestra responsabilidad el conservar el esplendor y la pureza de tan maravilloso regalo, no podemos permitirnos el lujo de despreciarlo apagando su brillo.
Porque de nuestro compromiso y buen hacer depende que, como cada año, la motivación que nos proporciona el espíritu navideño quede solo en un puñado de buenas intenciones.
Tenía Thomas Carlyle más razón que un santo al decir:
De nada sirve al hombre lamentarse de los tiempos en que vive. Lo único bueno que puede hacer es intentar mejorarlos.
Queridos amigos, me despido hasta el próximo año, en el que confío tenga la voluntad necesaria para comenzarlo haciendo realidad todo aquello que me proponga.
Mil gracias por vuestro apoyo e interés en La Columna de Vickie, vosotros me dais la ilusión para escribir lo que siento. En mi blog encontrareis más artículos, reflexiones, pensamientos, reseñas, mis libros publicados…En ese rincón me podréis conocer un poquito más ¡Os espero!
UN BRINDIS POR NUESTRAS BUENAS INTENCIONES Y SOBRE TODO POR LLEVARLAS A BUEN TÉRMINO.



