Justo ayer, nos despertábamos con la noticia de una reforma integral y “cambio de look” del Mercado Municipal en Lloret de Mar, con una inversión de más de 2,5 millones de euros, donde paradas de alimentación convivirán con establecimientos de degustación, sin pensar en el aluvión de cierres de persiana que se están viviendo en el municipio justamente de esos dos sectores, como por ejemplo entre decenas, el supermercado Bon Preu del Rieral -que cerró sus puertas a finales de febrero- y el inminente ‘cerrojazo’ del mítico Supermercat La Pau, al cual hoy dedicamos esta nota desde la Gaceta:
Se vivía la década de los años 60 en Lloret, todo eran posibilidades y todo el mundo era bienvenido, magia en cada calle e inocencia, ante un proyecto de turismo esperanzador que se sentía en el ambiente.
Llegados de Granada, José Navarro y Mercedes García junto a sus 7 descendientes y una maleta cargada de ilusión para la Costa Brava. De familia cárnica, y de carácter emprendedor, se hicieron un hueco en los mataderos de la población y al poco tiempo-corría el año 1971-decidieron montar su propia carnicería con José Navarro (hijo) a la cabeza del proyecto, en los bajos del edificio La Pau, y de ahí el nombre del comercio.
Inicialmente formaron una piña, ante un negocio familiar, siendo 9 personas implicadas (padres e hijos) las que abastecían a vecinos y turistas en unos años dorados y vista la oferta y la demanda de la época, complementaron la carnicería con todos los productos necesarios para un hogar, siendo en 1983 cuando oficialmente nació lo que a día de hoy conocemos como Supermercat La Pau, con Encarna Navarro y su marido Ceferino Ortiz como gerentes de la parte de supermercado y José Navarro (hijo) y su otra hermana, Ángeles Navarro en la parte cárnica y los cuatro hermanos restantes se “independizaron” montando otras carnicerías por su cuenta en diferentes puntos de Lloret.
Transcurrían años de gloria en el negocio, y se incorpora la nueva generación al trabajo familiar con un joven Carlos, pero la progresiva llegada masiva de turismo con el paso del tiempo, el rápido crecimiento de Lloret y los cambios de hábitos en la sociedad, acostumbrándose a comprar en grandes superficies, hacen que haya ido en declive el tipo de negocio que la familia Navarro-Ortiz presentó hace más de 50 años como un supermercado cercano y familiar.
52 años después, y una serie de infortunios, como la pandemia y la forzada jubilación de Ceferino por un accidente, entre otros, la familia Navarro-Ortiz decide bajar las persianas del mítico Supermercat La Pau y pone todo su género en liquidación.
Invitan a todos, a aprovecharse de este REMATE FINAL, hasta que acaben con las existencias, que calculan será hasta mediados de abril, con vinos, licores y productos de limpieza al 30 % y la alimentación con un 20%. Excepcionando la fruta, que seguirán trayéndola fresca a diario hasta el último día, donde se despedirán, no sin antes agradecer a todos sus clientes estos años de alegria.
Mucha suerte familia
Jo he anat poquetes vegades per ubicació pero sempre que he anat , ha sigut de deu tot, amb la carn, la fruita, el tractar a la gent..
quina llàstima aquest tancament, la baixada de persianes d’aqyests comerços fan molt de mal. 🥲🥲🥲🥲
Des d’aqui els hi vull desitjar el millor