Alimentos tóxicos para nuestras mascotas

Estamos en época de castañas y sois muchos de vosotros, los que nos llamáis a la clínica asustados porque vuestro peludo os ha robado alguna y se la ha comido, pensando que puedan ser tóxicas, al igual que sucede con algunos otros alimentos en perros.

Pues bien, partiendo de la base de que los perros, a pesar de lo que normalmente se cree, al igual que los humanos, son animales omnívoros y por tanto, pueden comer de todo; bueno, especifiquemos, de casi todo y es por ello que en este artículo os vamos a detallar algunos alimentos tóxicos o perjudiciales para nuestros compañeros de cuatro patas.

En primer lugar, están el grupo de alimentos, que al igual que en humanos, son perjudiciales para los animales de compañía. Los perros o gatos no deben tomar alcohol (si es que éste se considera un alimento), carnes, pescados o huevos sin cocinar. Estos pueden transmitir infecciones graves como el caso de la salmonelosis en los huevos crudos, parásitos como anisakis en el pescado crudo o enterobacterias y otras infecciones graves transmitidas por comer carne sin que haya sido sometida a un tratamiento térmico.

También les sucede como en las personas y con los años, se vuelven intolerantes a la lactosa, por lo que a algunos perros el hecho de tomar leche o derivados lácteos puede producirles diarrea severa.

Por otro lado tenemos el grupo de alimentos que en humanos son muy bien tolerados pero en perros no, por poseer alguna sustancia nociva para ellos o tener mayor sensibilidad a alguno de sus componentes. Estos alimentos son:

• El café: Los perros tienen una mayor sensibilidad a la cafeína y pequeñas dosis de ésta pueden producir efectos exacerbados de nerviosismo, inquietud, taquicardia, pudiendo hacerles pasar un mal rato si toman café.
• Chocolate: A los que os gusta el buen chocolate, con niveles superiores a 85% de cacao (chocolate negro), tenedlo bien a recaudo de vuestra mascota. El cacao posee un componente que es la “teobromina”, la cual, si es ingerida en altas dosis puede llegar a causar la muerte de vuestro apreciado amigo. Tienen que comer bastante para que vuestro perro fallezca, pero de un cuadro de malestar diarreas y vómitos seguro que no se libran.
  La dosis tóxica de teobromina en perros es de 100mg por kg de peso y en el gato es de 80 mg/kg. Si tu perro es un gran danés tendrá que ingerir 10 tabletas de chocolate negro 90% de pureza para morir pero un chihuahua de 2kg de peso podría intoxicarse con solo 200 gramos de éste.
• Manzanas: ¿Pero se ha vuelto loco este veterinario o qué? ¿Desde cuando las manzanas son perjudiciales?. Tenéis toda la razón, las manzanas no producen ningún perjuicio a nuestros compañeros de vida, pero sí son extremadamente tóxicas sus semillas. Si ofrecéis manzanas a vuestros animales no deberíais permitir que se coman el corazón con las semillas ya que éstas poseen un componente que se llama “amigdalina”, que es un precursor del cianuro, el cual impide el transporte del oxígeno en sangre, produciendo asfíxia. Siempre me acordaré cuando en la facultad de veterinaria me explicaron que un kg de semillas de manzana podría matar a un caballo.
  Nunca os habéis comido una almendra amarga, pues bien, ya sabéis a que sabe la “amigdalina” ya que las almendras amargas también son ricas en este componente.
• Huesos de melocotón: éstos no son nada tóxicos pero los incluyo aquí porque por su morfología, cuando el perro los ingiere, existe un porcentaje muy alto de que éste se quede atascado en el intestino. De media solemos operar entre 3 y 4 perros al año por obstrucción intestinal por hueso de melocotón, en nuestra clínica veterinaria.
• Aguacate: este “oro verde” tan apreciado para los humanos no es tóxico por su pulpa, pero sí la cáscara, las hojas o el hueso, que posee un componente denominado “persina”, productor de vómitos y diarreas.
• Cebollas: altas dosis producen hemolisis (rotura) de los góbulos rojos, dando lugar a anemias de muy difícil tratar en nuestros animales de compañía.
• Ajo: en pequeñas dosis puede ser hasta beneficioso ya que posee un efecto antiparasitario pero en altas dosis también puede producir anemias.
• Frutos secos: algunos más que otros y aunque todos en altas cantidades pueden producir trastornos gastrointestinales hay algunos como las nueces de macadamia que pueden llegar a producir problemas neurológicos como descoordinación, ataxia, letargia y temblores.
  

Por último, y no por ello menos importante, debo hablaros de las uvas, las cuales, a pesar de su delicioso sabor y aspecto inocuo, es uno de los alimentos más peligrosos para nuestros peludos por su presencia en todas las casas y la facilidad de ser ingeridas. A día de hoy no se sabe cual es el componente de esta fruta que tan daño causa en nuestros animales pero se sabe que no es la semilla, ya que las variedades sin semillas también son tóxicas, al igual que las pasas. También se sabe que hay una predisposición individual de los perros, lo que quiere decir que algunos de ellos toleran bien pequeñas cantidades de uvas.

Tras la ingesta de uvas, nuestros perros y gatos empezarán con una primera fase en la que mostrarán un cuadro de vómitos y diarreas y tras 48 horas aparecerán los problemas renales; mayor ingesta de agua y problemas para concentrar la orina. Muchos de estos problemas de riñón pueden llegar a ser irreversibles si no se tratan a tiempo.

Y esto es todo por el momento, espero que este pequeño artículo en la Gaceta de Lloret os haya ayudado a solventar vuestras dudas sobre lo que pueden o no comer vuestros compañeros peludos.

Si os ha quedado alguna duda siempre nos podéis contactar en el teléfono de la clínica 972377550, por email en robert.canvet@gmail.com o por Instagram @canvet_veterinari.